En un mercado de pases en el que clubes, representantes y jugadores intentan lucrar hasta con su manera de respirar durante una negociación, Atlético tiene a disposición una carta que aún no sabe si realmente utilizará: la de sumar un refuerzo a costo cero. Sin cargo y sin opción. Qué tal.
No es un regalo del cielo lo que tiene a mano el “Decano”, más bien es una oferta que vino como agregado a lo que significó el camino previo a la venta de Guillermo Acosta a Lanús. Cuando parecía que la operación tenía destino de naufragio, desde el “Granate” agregaron la opción de prestar a uno de sus futbolistas gratis, por lo que Atlético debía encargarse únicamente del sueldo que arregle con el jugador en cuestión. Era, algo así, como el as que sacó a relucir el “Grana”. Sumó a la historia, pero tampoco enloqueció.
Ante la insistencia de Acosta de dar el paso hacia Buenos Aires, de irse del “Decano”, la comisión directiva aceptó el ofrecimiento de Lanús, U$S 1,2 millón de dólares que, descontados costos y impuestos, comisiones y demás, fueron U$S 800.000 limpios a parar a las arcas del estadio Monumental. Mientras que lo del préstamo quedó stand by hasta que Ricardo Zielinski decida. Por sí o por no.
Entre los nombres que Lanús ofreció de su plantilla, de los prescindibles liberados por el entrenador Luis Zubeldía, picó en punta el volante central Fernando Barrientos, uno de los proyectos que jamás pudo explotar en todo su esplendor en el “Granate”. Barrientos era una de las joyas de la cantera. Ojo no es un improvisado. A los 27 años ya jugó en Europa (Villarreal B, de España) y también tuvo un paso por Rosario Central. No tiene lugar en el club que lo vio surgir, entonces es mejor partir.
En Atlético no le han bajado el pulgar, es cierto. Zielinski lo tendrá en cuenta, aunque por ahora no dará el sí. Eso es lo que piensa el técnico hoy. Quizás cambie de parecer la semana que viene. O antes del cierre el libro de pases.
Una de las razones por la que el “Ruso” es medio reacio a sumar a Barrientos o a otro futbolista, cualquiera sea el caso, es que no quiere superpoblar su plantel, y menos traer un mediocampista donde ya tiene y de buena calidad. Porque en la posición de Barrientos están Rodrigo Aliendro, Nery Leyes, Juan Mercier, Favio Álvarez y Claudio Pombo. Incluso, si ocurriera una catástrofe, Zielinski podría ubicar provisoriamente por ese sector del campo a David Barbona o a Gervasio Núñez. O sea, hay mano de obra de sobra.
Igualmente, valga la insistencia: ni Atlético ni Zielinski desecharon el ofrecimiento de Lanús. Lo que sí, por ahora no habrá humo blanco.